Por: Freddy Argimiro Gutiérrez Fassano
Si tú vas a una tienda de ropa y ves en la vitrina una
franela de tu agrado es probable que determines antes de medirte la prenda si
ésta te va a servir o no, pues tanto la franela como tus dimensiones son
observables y medibles a simple vista.
Ahora bien ¿qué ocurriría si intentas ponerte una franela
que evidentemente no se ajusta a tus magnitudes? Ah, maltratarías la tela y
también podrías maltratar tu cuerpo… Bueno, algo parecido acontece cuando una
persona canta un tema que está fuera de la “talla” que a esa persona le
conviene. Luego viene la típica frase: “es que yo no sirvo para cantar”.
Volvamos a la tienda de ropa y pensemos en alguien que
después de probarse una franela de talla equivocada termina comentando: “es que
yo no sirvo para usar franelas”… Absurdo ¿no?...
Toda voz tiene unas proporciones y unas cualidades
específicas tal como ocurre con cualquier parte de nuestro cuerpo.
Lo primero que debe hacer un hombre o una mujer que desee
aprender a cantar es caracterizar su voz. Hay quienes resuelven esto por cuenta
propia y hay quienes necesitan ayuda. Una vez que tomamos conciencia del
tamaño, la textura, el color y el peso de nuestra voz el proceso de avance se
agiliza. Haz este ejercicio y lo constatarás:
De las siguientes categorías escoge aquella donde consigas
desenvolverte con soltura y dentro de esa categoría elige las voces que más se
parezcan a la tuya o los fragmentos que logres cantar con mayor facilidad. Procura
puntualizar en cada uno de los ejemplos que escuches si estás ante una voz lisa
o áspera, clara u oscura, potente o suave, etc. Al cotejar tu voz con las voces
seleccionadas no intentes llegar a las notas altas o a las notas bajas que se
encuentren fuera de tu alcance.
Categorías para hombres:
Categorías para mujeres:
Atención:
·
Omití intencionalmente
el nombre de las personas que cantan para evitar que eventualmente surjan
prejuicios positivos o negativos que saboteen el ejercicio. Encárate con las
voces y olvida por ahora todo lo demás.
·
A lo mejor notas que
ciertos artistas aparecen en más de una categoría. Recuerda que ellas y ellos
dominan ampliamente su oficio y por eso manejan sus voces con tanta destreza.
·
Si reconoces al dueño
o a la dueña de una de las voces utilizadas y sientes que su registro es igual
al tuyo, no vayas a caer en el error de suponer que cualquier pieza
interpretada por él o por ella te va a servir a ti.
·
Si reconoces la
canción a la cual pertenece el fragmento que te favorece, no vayas a caer en el
error de suponer que obligatoriamente la pieza completa se adapta a tu “talla”.
·
Este material ha sido
diseñado para jóvenes y adultos y no debe ser aplicado en niños y adolescentes.
¿Tienes alguna pregunta?
Revisa aquí la segunda parte de este trabajo:
Gracias y saludos a todas y a todos.
Atentamente: Freddy Argimiro Gutiérrez Fassano